técnica de motivación
La técnica de motivación más breve
Y como no hay mayor motivación que demostrarle a un listillo que se equivoca al decirme que mis artículos deberían ser breves… me he puesto a escribir un artículo breve.
Un plan sin fisuras.
Y si hubo una «profesional» en el mundo experta en «brevedades», esa fue mi madre.
Angelita.
Una vez, con 10 años o así, andaba yo leyendo Mortadelo y Filemón, tan ricamente en el sofá.
Mi madre se acercó y me dijo:
—Niño, ve al economato y compra pan y huevos.
—Mamá, ahora no tengo ganas.
Entonces, mi progenitora se acercó aún más para susurrarme:
—Pues entonces hazlo sin ganas.
Luego añadió un insulto que no me parece necesario mencionar aquí.
Angelita, sin saberlo, había acuñado la técnica de motivación más breve jamás aplicada.
Y sin saberlo también, aplicó la primera regla de las psicología motivacional:
Si esperas a tener ganas para hacer las cosas, ni las cosas se hacen ni las ganas vienen.
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